Click acá para ir directamente al contenido

Crianza: el desafío de las familias en la actualidad

  • Lunes 15 de mayo de 2023
  • 17:01 hrs

El académico de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, Dr. Pablo Palma, compara la crianza actual con la entregada cuatro décadas atrás. Destaca el rol de las familias actuales y la importancia de dar contención emocional a niños, niñas y adolescentes, a propósito de la conmemoración este 15 de mayo del Día Internacional de la Familia.

Décadas atrás conformar una familia y educar a los hijos representaba, como adultos responsables, entregarles a los niños, niñas y adolescentes los soportes vitales básicos para su crecimiento y desarrollo: techo, alimento y educación. En la actualidad, el reto de constituir ésta, incluye además asegurarles el soporte emocional.

Dicha realidad es descrita por el director (I) de la carrera Psicología de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, Dr. Pablo Palma, como un desafío, puesto que, a la labor por crear un vínculo sólido entre padres e hijos, se anteponen responsabilidades como el trabajo y la consecuente limitación de tiempo. 

Con motivo del Día Internacional de la Familia, que se celebra cada 15 de mayo, el académico analiza el nuevo rol de la familia y advierte que el soporte emocional, apoyo y contención de los hijos e hijas siempre han sido fundamentales en la crianza. Sin embargo, en la actualidad son socialmente aceptados y reconocidos. Es preciso que padre, madre y/o cuidadores principales estén presentes en calidad de tiempo y no necesariamente en cantidad. 

Palma reconoce que existe un choque generacional y que resulta típico escuchar a personas, mayores de 40 años, decir que en su infancia no recibieron soporte emocional y esto no los afecto negativamente. Sin embargo, es en este grupo etario en el cual se registran altos índices de tabaquismo y alcoholismo.  

A juicio del académico, el actual desafío es generar un fuerte vínculo emocional entre padres e hijos, sean estas familias tradicionales o nuevas configuraciones de familia, es decir, padres separados o solteros, padres y abuelos, entre otros. 

LA CULPA

Socialmente son las mujeres quienes suelen sentir mayor culpa por pasar poco tiempo de compartir con sus hijos. Sin embargo, Palma indicó que las madres trabajadoras transmiten mayor desarrollo profesional y personal, lo cual también se refleja en la crianza; el resultado son niños, niñas y adolescentes con madres con alta autoestima, seguridad y mejor autoconcepto, mismos valores que se traspasan a los hijos. 

“Más que la cantidad de tiempo es el tiempo de calidad. Pueden ser 10 minutos al día, pero si yo vinculo emocionalmente con mi hijo, son minutos válidos…Ese sano vínculo permitirá que haya confianza en los temas que se conversan y comparten. Esto puede ser incluso cuando yo lleve a los hijos al colegio; ir con ellos conversando, sabiendo en qué están y demostrando al hijo o hija que uno está presente”, apuntó.

CORREGIR LA CONDUCTA

Palma advierte que contener no significa justificar. Por el contrario, siempre se deben hacer las correcciones necesarias, pero se debe corregir la conducta, no a la persona. 

 “Se necesita que padres, madres y cuidadores separen la persona de la conducta. De lo contrario, el niño o la niña van a creer que son ellos el problema, el malo o la mala”, comentó.

Como ejemplo señaló que, si un niño rompe un objeto, el ideal es señalarle que debe tener más cuidado, porque lo ocurrido no estuvo bien. Es un error hacerlo sentir torpe y achacarle culpas.

DISCIPLINA

Actualmente, uno de los términos más comunes en materia de maternidad y paternidad es la “crianza respetuosa”, concepto que suele confundirse con indisciplina. No obstante, el académico explicó que las relaciones de padres e hijos, a pesar del modelo de crianza implementado, siguen siendo verticales, puesto que existe una autoridad (padre, madre o cuidador principal) y quien obedece por ser menor de edad (hija, hijo y adolescente).

“Se confunde un poco y se cree que no es disciplina, pero en una crianza respetuosa y democrática debe haber disciplina, porque uno es el padre o la madre o cuidador principal, no el amigo del hijo”, añadió. 

Palma reconoció que la crianza actual es más compleja, dados los múltiples estímulos de la sociedad. Allí radica la importancia de la contención de los padres y el núcleo familiar. “Los niños, niñas y adolescentes van a vivir múltiples experiencias y uno tiene que contenerlos. No significa que uno va a justificar cosas que le pueden haber pasado, pero se debe entender cómo ellos sufren por eso…y eso antes no existía”, acotó.

Al consultarle si es cierto que las generaciones más jóvenes son más sensibles, confirmó la hipótesis y subrayó que es así porque el actual pensamiento social lo permite. Esto a su vez promueve que sean personas más abiertas, inclusivas y respetuosas ante las diferencias.

Académico de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, Dr. Pablo Palma